¿”Fundamentalismo maternalista” en los padres actuales?

Según la catedrática de Derecho Civil  de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) Rosario Valpuesta Fernández, existe en los padres y madres actuales una especie de “fundamentalismo maternalista” que supera con creces el que existía en la época franquista, un sentido exacerbado de la “propiedad” sobre los hijos que va en detrimento del interés del menor. Así lo manifestó en  el marco del seminario “Derecho y Psicología: gestión de conflictos” que la UPO organiza durante esta semana como parte de la programación estival de la IX edición de los Cursos de Verano en Carmona,  en su ponencia sobre la “Psicología jurídica aplicada a las crisis familiares II: Menores, relaciones de pareja” sobre “los marcos y posibilidades de movimiento del Derecho Civil en el ámbito familiar para la gestión de conflictos en los que la integridad personal y social del menor peligra.”

Para Valpuesta lo mejor sería no tener que ir al juez y recurrir en cambio a las vías intermedias para la resolución de conflictos familiares como es el caso de la mediación, en la que desempeñan un buen papel los psicólogos.

Valpuesta pone sobre el tapete cómo en ocasiones como consecuencia de los conflictos de pareja se contamina e incluso se utiliza a los hijos a los que hay que ver como “personas y ciudadanos” con derechos propios y sobre los que el Estado está obligado a velar vigilando activamente a los padres, que, según la Constitución española, no son “intocables”, para así garantizar la correcta formación  y desarrollo de los niños, recurriendo a la retirada de la patria potestad si es necesario. “La idea de muchos jueces de que el derecho a los niños es sagrado es equivocada”, ha añadido Valpuesta.

En relación a la patria potestad Valpuesta destaca la “complejidad y conflictividad” que supone para la Justicia el que haya que tener en cuenta que aquélla sufre modificaciones en función de la edad del menor, su autonomía y su capacidad de decisión, cosa para la que en la Justicia no existen reglas fijas.

Valpuesta define el rol del menor como el de un “actor social” o “actor político”, siempre de acuerdo con su edad, lo que parece no contemplarse en la actualidad. 

De acuerdo con la catedrática se ha perdido la noción por un lado del papel del menor y, por el otro lado, el hecho de que los padres renuncian a educarle declarándose incapaces ante el Estado para tutelar a un adolescente conflictivo, lo que no es otra cosa que un reflejo “de problemas relacionales en el ámbito familiar.” 

Hoy en día tiende a exaltarse la autonomía de los menores, y Valpuesta pone como ejemplo de ello las intervenciones estéticas en niñas de 16 años, “la posibilidad de elegir sobre el aborto o la elección de llevar o no velo.” Para Valpuesta "Lo moderno no es eso; lo moderno es que los niños sean capaces de tomar decisiones por sí solos en el sistema conforme al desarrollo de su personalidad y su edad.

Fuente
http://www.20minutos.es/noticia/1121879/0/
Imagen:
http://www.chicospl.com/2010/02/siento-que-mi-mama-no-me-quiere/