“… los seres
humanos de todas las edades son más felices y pueden desarrollar mejor sus
capacidades cuando piensan que, tras ellos, hay una o más personas dignas de
confianza que acudirán en su ayuda si surgen dificultades. La persona en la que
se confía, designada también como attachment figure (Bowlby, 1969) (figura a
la que se tiene apego) puede considerarse que proporciona a su compañero (o
compañera) una base segura desde la cual operar.”
John Bowlby
A partir de
los estudios de René Spitz, John Bowlby, Mary Salter Ainsworth y Françoise
Dolto, entre otros, es fácil hacerse una idea acerca de a qué pueden deberse
las dificultades que experimentan ciertos niños a todas las edades (y más
adelante, en la adolescencia y cuando llegan a adultos) a la hora de separarse
de sus padres o cuidadores y especialmente para desenvolverse en ambientes
extraños.