miércoles, 29 de febrero de 2012

No quiero ir al cole


“… los seres humanos de todas las edades son más felices y pueden desarrollar mejor sus capacidades cuando piensan que, tras ellos, hay una o más personas dignas de confianza que acudirán en su ayuda si surgen dificultades. La persona en la que se confía, designada también como attachment figure (Bowlby, 1969) (figura a la que se tiene apego) puede considerarse que proporciona a su compañero (o compañera) una base segura desde la cual operar.”
John Bowlby

A partir de los estudios de René Spitz, John Bowlby, Mary Salter Ainsworth y Françoise Dolto, entre otros, es fácil hacerse una idea acerca de a qué pueden deberse las dificultades que experimentan ciertos niños a todas las edades (y más adelante, en la adolescencia y cuando llegan a adultos) a la hora de separarse de sus padres o cuidadores y especialmente para desenvolverse en ambientes extraños.

martes, 14 de febrero de 2012

Aprendiendo a Ser Responsables


Constituirse como persona responsable implica ser capaz de asumir las consecuencias, buenas o malas, de las elecciones que hagamos en un momento o circunstancia determinados respecto de uno mismo o de los demás. Esto está íntimamente relacionado con el hecho de constituirnos como seres sociales en un contexto social.

 No existe ninguna posibilidad de constituirnos como sujetos sociales si no somos educados para ello desde el vamos, y esto implica el aprender a soportar la frustración, el rechazo o las limitaciones que los otros ponen a nuestros deseos o a nuestra libertad. Pero esto no se consigue de la noche a la mañana, es un proceso. Y como tal proceso, tiene un principio y quizás también un final.

jueves, 9 de febrero de 2012

Poner límites a los niños: ¿cuándo, cómo, por qué?


“Sucedió algo terrible y es que el discurso de los psicoanalistas se entendió mal. Françoise Dolto dijo que no hay que culpabilizar, sino dirigirse al chico como un ser humano responsable, pero todo lo que quedó fue lo primero. También dijo que el hijo debe estar en la periferia de la pareja, no en el centro. Sin embargo, por diversas condiciones sociales, el niño se transformó en un objeto raro alrededor del cual uno se centra, que da sentido a la vida, en lugar de ser periférico. Por otro lado, nunca en la historia de la humanidad se vieron en tan poco tiempo tantos cambios. 


Lo que recibimos de nuestros padres, y que ellos a su vez recibieron de los suyos, no nos sirve para nada. Ahora tenemos que preparar a los chicos para una vida que no conocemos. Antes estaba instalada una educación dirigista, que trataba a los chicos como si fueran pequeños primates. Y de allí se pasó a una especie de abandono del niño, porque no decir que no es una especie de abandono por parte de los adultos. Eso produjo una catástrofe de gran perversión y ahora se quiere volver al rigor. Pero el ser humano es un mamífero muy particular, de modo que no tiene que educarse como un animal ni abandonado a sí mismo. Actualmente, somos el único mamífero que no les da a sus pequeños los códigos para vivir en sociedad. Como si el hecho de nacer de un hombre y una mujer fuera suficiente para hacer de nosotros un ser humano. No... la humanización se construye. Pensamos que es suficiente amar, pero no lo es. Hay que amar... bien.”
Catherine Doltó*